Día del Trabajador en PRL

 
En la República Popular de Polonia se celebraron solemnemente tres días festivos: el 1 de mayo, el 22 de julio y la Revolución de Octubre el 6 o 7 de noviembre. El 1 de mayo fue celebrado con más pomposidad, porque la primavera también animaba a las personas a dejar sus hogares, el horario escolar permitía el control total de los niños y adolescentes, y estos grupos de edad eran el núcleo de todas las manifestaciones.

Unos días antes, ciudades enteras fueron decoradas con innumerables banderas, siempre junto a las banderas blancas y rojas había que colgar al menos dos rojas. Sin embargo, estos conjuntos solo colgaban de edificios ocupados por las autoridades locales. Los propietarios tenían la responsabilidad de exhibir la bandera nacional. De alguna manera, la compulsión de mostrar banderas rojas no era la máxima prioridad. Las calles fueron patrulladas por la policía, y los que tardaban en exponer la bandera, fueron advertidos o amenazados. Las mismas patrullas recorrían las calles nuevamente el 2 de mayo y con una vigilancia doble se aseguraban de que todas las banderas se hubieran ido antes del 3 de mayo, ya que la celebración de este día no fue reconocido como el Día de la Constitución.

La manifestación y la celebración del 1 de Mayo en su conjunto se han convertido en uno de los símbolos de la República Popular de Polonia. Para algunos era un símbolo de la esclavitud de la sociedad, para otros fue un recuerdo de diversión y celebración.

 

 

Durante la República Popular de Polonia en 1951, el 3 de mayo desapareció del calendario como día festivo. Las personas que querían manifestar la memoria de la constitución de 1791 y, sobre todo, protestar contra la política comunista en Polonia, fueron reprimidas de diversas formas. El 3 de mayo es también una de las fiestas religiosas más importantes, lo que, además, provocó la desgana de las autoridades comunistas.

La fecha del 2 de mayo para la celebración del Día de la Bandera no fue elegida por casualidad. La primera razón fue que en la época de la República Popular de Polonia, las banderas nacionales se retiraban ese día después del 1 de mayo, para que no se mostraran el día 3 de mayo, Día de la Constitución, abolido por las autoridades comunistas. La segunda razón fue el establecimiento de una bandera blanca y roja en la Columna de la Victoria - Siegessaule y en el Reichstag en Berlín el 2 de mayo de 1945 por los soldados polacos que conquistaron la capital de la Alemania nazi. Entonces, los polacos decidieron que el 2 de mayo sería el día adecuado para honrar la bandera polaca.

El Día de la Bandera se celebra en virtud de la enmienda a la Ley sobre el emblema, los colores y el himno de la República de Polonia, adoptada por la Sejm el 20 de febrero de 2004.

  El Día de la Bandera de la República de Polonia es muy importante. Muestra respeto por el símbolo de Polonia. Es costumbre decir que ese día los ciudadanos polacos deben exhibir la bandera polaca, por ejemplo, en la casa o en el balcón.

Entonces se puede decir que no hay manifestación más hermosa de identidad nacional que el despliegue de símbolos que nos han acompañado durante siglos. Símbolos que están profundamente arraigados en nuestros corazones desde el nacimiento hasta la muerte.

El joven de la fotografía, en el primer plano de la derecha, es el que escribe. La foto tomada en 1974. Un grupo de estudiantes de la secundaria, parecen deportistas, manifestando su lealtad a los gobernantes comunistas. En verdad fuimos obligados presentarse a esta manifestación del 1 de Mayo. Nos entregaron objetos de gimnasia artística que nunca tuviéramos en la mano. De todos nosotros que aparecen en la foto me parece que el único era yo que tenía que ver algo con el deporte. La propaganda se fue a los medios y Nowa Sól, como tantas otras ciudades en Polonia cumplieron su rol de lealtad a PZPR.